miércoles, 19 de noviembre de 2014

Sin dolor erótico


Voy a dormir
en la almohada del placer, lacerante
tener sueños eróticos
y no beber el dolor

De la conciencia no quiero saber
el recuerdo sórdido
cremado en la arena
en las llamas de ese grito

Todavía no anda por acá
flota en la intemperie
sus manos resbalan, me suelta
gotea la soledad en su alma

Por eso prefiere dormirse
no acudir al santo grial
no anda de últimas
prepara a los hombres