lunes, 10 de junio de 2013

De origen hebrea

Para mi mejor definición de amor...


La otra mañana fue reveladora.
Abrí los ojos, vire la cabeza hacia el costado
sobre mi hombro reposaba la cabellera de la mujer
que soñé hacía cinco años.
La desperté, esbozo una sonrisa y me dijo: " Que pasa mi amor."
Para ese momento transitaba el summun
y deje rendirle pleitesía a la felicidad
para ponerla netamente a mis pies.
Ahora le puedo seguir la corriente a la vida
el subsuelo me queda bien lejos
sobre la superficie yace la plenitud (de haberla conocido)
Dadme de eso y no te quites de encima
propongo seguirla alegoricamente post mortem
Cada trazo dibujado con la pasión
nos obliga a mantenernos eternos    

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