jueves, 25 de octubre de 2012

Oh amada libertad

No me preguntes cual es son las razones de mis tormentos, porque no sabría contestarte oralmente sino que todos mis juicios para con algunas condenas existenciales, quedan debidamente expuestos en la escritura. Esto no se trata de ningún tipo de pronostico sobre nada, solo es lo que aflora cuando comienzan algunas preguntas internas. Las estanterías se debilitan y ya no es lo mismo que ayer vivir, sino que es una tarea con otra dirección.
Saber de que se trata a veces puede resultar un acto de ebullición en nuestro interior, por razones, quizás, poco lógicas. Lo que si puedo comentar a modo, casi, de experiencia es: Cuando pasan estas cosas dentro de uno se empiezan a conocer un poco mejor los caminos hacia la libertad, lo cual no significa que vayamos a alcanzarla pero si a perseguirla con más convicción. A modo de ejemplo con esto que estoy desarrollando, voy a comentar una frase que leí en el afiche de una película en una estación de subte. Decía algo así como: " La utopía no es un punto de llegada sino que es un camino", esto a modo de ejemplo puede servir a lo que estaba hablando antes, porque nos invita a reflexionar sobre que tipo de recorrido es el que queremos hacer nosotros en esta vida.

viernes, 19 de octubre de 2012

bolchevita

Si no se esclarecen las atrocidades
y tu corazón tiende a oscurecer
naufragando tormentos poco usuales
se desvanece la vida y ni cuenta te das

Probamos mil cosas para no aflojar
las noches difíciles de ser normales
planeando un salto de longevidad
preguntarse por qué hace mal

Aceptando todo como nos contaron
no aceptamos que algo puede cambiar
cuestionando cualquier acto novedoso
la juventud (para ellos) siempre sera igual

Lo que no se puede manejar
es una probable causa demencial
resulta ajeno un plan soviético
se que a kennedy lo seguirías matando

sábado, 13 de octubre de 2012

Las obsesiones de Martillo


“De todas las posibilidades que hay para contar una historia, puede que esta sea un desparpajo para su complicidad narrativa.”
Anónimo.

La avenida es ancha y contiene varias casas que se posicionan a lo largo de toda la calle, lo mismo ocurre del lado de enfrente. El pueblo “Péndulo” es minúsculo en diámetro geográfico pero  amplio en calidad de habitantes, se llego a decir que de allí surgían los mayores artistas en hurto a mujeres ajenas. Igualmente esto no está totalmente comprobado, hasta el momento solo se conocieron dos casos en donde se fusiono el ser humano con el buitre[1]. Sea como fuere estos datos son dispersos y no quiero decir una cosa por otra, no quisiera tener problemas con la gente de Péndulo.
Este lugar ofrece varias actividades para sus habitantes, se puede hacer desde deportes hasta bonsái. En épocas de vacaciones se recomienda como uno de los pueblos a conocer; hace poquito me entere que se pudo terminar de construir la casa de turismo, también me entere que hubo festejos por ese motivo y que se produjo una borrachera superadora a la de otros festejos pasados. Se dijo que lo más destacable de esa fiesta fue la orgia que se desato, cuando “el loco martillo” entro al salón con la verga en estado rocoso y provoco tal conmoción (de alegría) que se empomó a la más infante del pueblo provocándole tal placer a esta infanta que ahora trabaja en lo que en una época se llamaba “Prostíbulo[2]”.
“El loco martillo”, es uno de los más problemáticos para algunos vecinos, generalmente más para las vecinas que para los vecinos pero a veces para los dos, no se sabe, según como se levante. Su infancia esta atravesada por los peores recuerdos, ya sea desde su familia hasta sus amigos. Su padre, apodado como “mamoncito” fue uno de los más bastardeados en el pueblo, se dice que su definición sexual se termino de acentuar pasados los cuarenta años (actualmente tiene 64 años), mientras tanto tuvo que vivir atormentado por su indecisión, probando desde enredaderas hasta raudas porongas que enchastraban su rostro, literalmente hablando.
Su madre, desesperada por no encontrarse en condiciones de poder ayudar a su marido, dejo la situación en manos del tiempo. Se dice que esta mujer ya estaba enloqueciendo por no ser cogida, de manera que mientras su marido se decidía, ella fue en busca de una cuenta pendiente. Toda su infancia había deseado revolcarse con el más potentado miembro del barrio, nunca pudo saber su nombre pero si donde vivía.  Una noche, después de haber acostado a su hijo, el ahora “Loco martillo”, decidió ir a cumplir su fantasía. A este niño se le hacía muy difícil dormir, hacia varias noches que no veía a su padre y escuchaba gemir a su madre encerrada en el baño. Para él era todo muy extraño, así que como no podía más con la intriga de no saber qué era lo que pasaba, esa noche siguió a su madre. La mujer se puso un tapado largo y sigilosamente se retiro de su casa, caminó largas cuadras hacia la casa del potentado viril. Algo nerviosa golpeo su puerta y se encontró con un hombre de barba tupida y robusto, mirando hacia ambos lados verificando que no haya sido vista, ingreso rápidamente. El niño del otro lado de la puerta, logro asomarse por una ventana. Tanto busco el niño que se encontró con su madre en un estado de lujuria máxima, desde aquella ventana que no olvidara jamás, fue testigo de la mejor cogida que recibió su madre en toda su vida.
Esta mujer casi babeándose bajo los pantalones de este hombre y se encontró con la dotación viril más humilladora que pueda existir. Tomó esa monstruosidad con sus dos manitos, empezó a chupárselo de forma voraz y este hombre arrancó sus ropas, para luego inclinarla en cuatro patas, arremetiéndola a unos gritos que ya escapaban al placer, la mujer pedía por favor que no se la introduzca toda pero no había caso esta bestia estaba engarzado a ella.
 Esa noche el niño corrió desaforadamente chocándose cualquier cosa que se le interpusiera en medio. Nunca más pudo volver a su casa. Sus amigos al enterarse de su situación comenzaron a burlarse, hasta que se dieron cuenta que la cosa estaba empeorando para él. La mayoría de su adolescencia la vivió en la calle, paso a ser un linyera en el pueblo. De sus padres nunca supo más nada ni tampoco quiso saberlo, su condición de calle  lo excluyó de todo, hasta de coger, las minas no se le acercaban porque estaba sucio.
De todas formas siempre se arreglaba con una buena paja en los baños de las plazas y así lograba reducir su excitación adolescente. Los años fueron pasando para este muchacho y ya no alcanzaba la paja, las minas le representaban un deseo múltiple pero no sabía cómo hacer. Estaba atravesando una de las tantas injusticias que sufre la persona que vive en la calle, se tenía que humillar para conseguir comida y hacer trabajos duros, para lograr pasar las noches bajo un techo. Si quería bañarse tenía que pagar, por lo tanto se le descontaban horas bajo el techo, al principio no lo hacía porque prefería dormir debajo de un techo con el frio pero después su necesidad por una hembra se le fue acrecentando, así que una noche cambio dormir bajo techo por bañarse y comer.
Después de comer la porción que le correspondía por su trabajo, fue en busca de un receptáculo que saciara sus ansias sexuales, caminando varias cuadras por una de las avenidas principales del pueblo sorpresivamente se encontró en uno de los cordones de la calle, un fajo de dinero con todos billetes de cien pesos. Nunca se supo igualmente la cantidad porque el cronista es un poco inexperto, pero calculamos él y yo que habían sido alrededor de cien mil pesos, así que de esta manera parecía ser que la suerte había empezado a visitarlo, tan solo le faltaba la compañía femenina, gran problema gran, ¿no?
Su forma de seducir era poco ortodoxa, casi nunca se le presento una situación de esas características, las pocas veces que estuvo con mujeres las amenazó con algún objeto cortante para que le entregaran su cuerpo. Todo esto era un nuevo desafío en su vida. Su mejor idea para dar comienzo a una noche gloriosa fue sentarse en un bar, al que cualquiera de nosotros nunca podría acceder, a no ser que contáramos con un trabajo de oficina donde nuestras libertades quedarían sosegadas, donde nuestra raza humana se fusionaría con un numero y del cual dependeríamos para el resto de la cosecha, ya que nuestro nombre quedaría ex – nominado de las filas de las jerarquías, de modo que pasaría a llamarme nueve, poseedor del cargo : empleado sin autoridad a decir explícitamente lo que pienso de mi jefe, porque sería echado automáticamente sin goce de ninguna indemnización. Todo esto va a qué mejor no asistir a esos lugares de alto target, mejores charlas se encuentran en los bares donde la bebida más pedida es la cerveza.
Seguimos…Martillo, sentado en un sillón con el mentón bien levantado pidió a la moza que le trajera su mejor wishkie en doble medida y en su mejor postura de ganador observaba las minas que pasaban por la puerta del bar.  Sorbió la bebida casi frunciendo el pellejo, sus primeros sorbos fueron de total rechazo debido a que él nunca había tomado bebidas de tales características. El hombre de bebidas preparadas con escasos artilugios, después de los dos vasos de wishkie se pego una borrachera digna de ser adquirida casi al final de una noche de gran jergón. Igualmente esto no fue un impedimento para su búsqueda de una buena hembra que absorbiera todos sus males sexuales.
Primero antes de acercarse a cualquier mujer, fue al baño porque sus ganas de mear eran de tamaña dimensión y si no lo hacía podría llegar a mearse encima a mitad de cualquier conversación. De regreso a su mesa vio que el sillón que estaba ocupando, lo ocupaba una mujer un poco pintarrajeada de más, que le daba continuadas pitadas a su cigarrillo. Se acerco a la mesa un poco sorprendido y le pregunto a la mujer si necesitaba algo, lo cual esta le contesto:
-Las noches son difíciles para mí, necesito tomar algo y la mejor fórmula es sentarme en la mesa de hombres que están solos, como tú.
-¿y cómo sabes que estoy solo?
-Es muy sencillo, primero tenes cara de no coger hace rato y segundo porque ya vengo observándote desde que pusiste tu culo aquí. Antes de que me sigas indagando, quisiera darte un consejo, la próxima vez que pidas wishkie pide uno de menor valor, tu inexperiencia para tomar te provoco una borrachera tal que tiraste la mitad de esta gran bebida, idiota.
-Si queres compartir la mesa conmigo deja de insultarme, perra barata porque seguramente vas a querer que te coja y lo voy hacer pero sin pagarte un centavo, ¿me oíste?
-Bueno tranquilo, guarda esa hombría para cuando estemos en la cama – dijo la mujer, un poco más apaciguada.
¿Qué haces en este bar, es raro ver tipos como tú, aquí. Te sacaste la lotería y estas presumiendo tu fortuna?
-Algo así, igual no es de tu interés. Estoy aquí porque quiero una buena hembra para coger y siempre supe que aquí hay buenas rameras.
-Puede ser que eso haya sido en una época, ahora podrás apreciarlo tú mismo, hay mujeres que quieren dejar de ser putas porque ya no les divierte ser mal tratadas, golpeadas y violadas por ricachones, que solo buscan demostrar en una reunión su condición de machos. Ellas no quieren ser más las anécdotas de tipos que limpian su mierda con los billetes que les sobran. Quieren que su profesión sea respetada como tal, de hecho ahora se formo el sindicato que las apaña y defiende su condición de obreras de la sexualidad.
-¿qué decis, obreras de la sexualidad. Que pelotudes de socialista es esa?
-Pues claro, obreras de la sexualidad. Ellas ponen el cuerpo todos los días de su vida para que le sea retribuido un dinero por sus servicios, como cualquier trabajo. Por eso claramente les corresponde un sindicato que las respalde, para que sufran en menor medida las injusticias que se dan en su profesión.
No tenes porque sorprenderte, vendemos nuestro cuerpo por un rato en el mercado, por lo tanto queremos garantías.
-Uh, yo pensaba cogerte nada más, por todo lo otro espero que tengan suerte. Yo lo único que te digo que si yo pongo la guita, vos pones tu condición de puta y te vas a explicarle tus pensamientos estúpidos a otro.
La charla fue extensa, parecía que no se concretaría nada para martillo porque sus respuestas enfurecían a la mujer, que aferrada a sus principios no accedería a ir a la cama, si no se respetaba esto como condición fundamental para su trabajo. Toda esta cuestión también lo enojaba a él, solo necesitaba sexo y lo único que estaba consiguiendo era ser oyente de una situación que no le importaba. La chica se paró de la mesa para ir al baño pero Martillo dándole jalones en el brazo no quería que se fuera porque quería concretar. Igual se fue al baño y le dijo que la esperase.
Apoyado en la mesa con un rostro que mostraba aburrimiento, se quedo dormido con medio cuerpo irrumpiendo el restante de la mesa. La seguridad del lugar al ver esto, intentó despertarlo porque no se podía permanecer en el lugar en esas condiciones pero no hubo caso. Lo agarraron de pies y manos y lo sacaron en posición de hamaca paraguaya. Hicieron unos balanceos para darle más impulso a la caída y lo tiraron como bolsa de papas al medio del asfalto. Cuando la chica regreso del baño no lo vio en la mesa pero se encontró con un granulado que tenia la frente sudada.    


[1] Buitre: ave rapaz, que se alimenta de animales muertos. Aquí la definición correcta si se quiere. Esta palabra en la jerga barrial va a tener connotación con una persona, que se dedica a alimentarse de mujeres ajenas.
[2] Otros nombres posibles: puterio, pelotero, etc.

viernes, 12 de octubre de 2012

¿Y las plumas sartreanas?

Préstame tu diario, yo te doy el mio. Veamos cual de los dos es el más revulsivo. Se hace necesario que dejes de aburrir con benévolas intenciones tupidas en estar del otro lado de la mirilla para saber como quedar bien.
Los jueces de la vida provocan con moral, es decir te cercenan las ganas de tener una personalidad. Cuesta creer en los oradores que se hacen llamar progresistas y después la viven y quieren un bonapartismo. Eso, concretamente, es coquetear sin vergüenza con personalidades para ganarse una dama o ser el más buscado.
Los más revoltosos - que por cierto, ya se sabe de que lado están - se quejan desde una extensión que produce letras y nos muestra cantos de sirenas, pero después ¿que pasa con todo eso?... simplemente, nada. Es más cómodo repetir frases hipócritas de referentes capaces en la mentira.
¿ A donde vamos con el lugar común del palos para todos? El porcentaje mayor de las personas que convive con nosotros todos los días, esta a la espera de que vuelvan; "Con los milicos estábamos mejor", dice una por allá y otro de más acá asiente, sin saber donde quedo su personalidad. Ahora resulta que tenemos al hombre de los tiradores como el defensor de la verdad y que esta con los más débiles. Resulta que ahora tenemos un par de tipos que se pasean por la tele como los radicalizados, al punto tal de definirse como alternativas revolucionarias ¡dejemos los chistes para más tarde!
¿ Y las plumas sartreanas? la escritura como herramienta para desnudar injusticias y las alternativas comunicacionales independientes, siguen sin tenerse en cuenta. El periodismo se ha dedicado a hacer publico cuestiones privadas, perdiendo de vista detalles que se logran teniendo un poco de compromiso con lo que vas decir ¿a quien le importa, esposo de quien es tal presidente? no es más importante que nos detallen punto por punto las plataformas políticas que tiene cada uno, en vez de decirnos a donde va a cenar. 

viernes, 5 de octubre de 2012

Chachara

Es una plegaria que tenemos que hacerle al alma, cuando se trata de asuntos donde intervienen los sentimientos. Para algunos cuesta trabajo pedirle permiso a la sensibilidad. No conviene, muchas veces, dejarla pasar porque te irrumpe la automatización y la armonía. Mejor no contestarle a las voces internas que se descarnan por decirte que hay un problema. Si aquel de al lado pega un grito de ayuda, mejor hacerse a un lado. Mira, si el muy puerco te chorea y te arranca un pedazo de propiedad. No, eso es inconcebible. En el mundo de hoy que cada vez progresa más individualmente conviene ponerse un protector en los ojos y pornagrafiar la vida, a cualquier sabandija que te ofrezca placer y cháchara.