martes, 22 de mayo de 2012

Un Cowboy contracultural







El hombre del que vamos a hablar hoy, se perforo la cabeza de un balazo y acabó con una brillantez siempre necesaria. Esta persona, nunca políticamente correcta es: Hunter Thompson.
Nació el 18 de Julio de 1937 en Louisville, Kentucky (Estados Unidos). Creció en el barrio de las zonas altas de la ciudad  y realizó la secundaria en un colegio masculino de Louisville. Sus padres se casaron en 1935, pero la muerte de su padre lo dejó al cuidado de su madre, que tenía problemas con el alcohol. De los 15 a los 18 años, creció repartidamente entre las rejas y la calle. Se dedicaba a robos pequeños (por ejemplo licores) para conseguir dinero.
Más tarde, se alisto en la Fuerza Aérea de Estados Unidos y luego trabajó en el departamento de información de la base en Eglin, Florida. Escribió, también, para varios diarios locales, pero siempre trascendiendo  las reglas de la fuerza Aérea. Trabajó, como copista para la revista “Time” y aprovechó para copiar libros de la talla de, por ejemplo: El gran Gatsby de F. Scott Fitzgerald y Adiós a las armas de Ernst Hemingway. Cuando hacía esto, decía que era para aprender los estilos de los autores. Estuvo un tiempo en esto, hasta que fue despedido de la revista, por, nuevamente, infringir las reglas. Fue jefe redactor de la sección política de la revista “Rolling Stone” (donde fueron famosas sus coberturas durante la guerra de Vietnam y la campaña política de Nixon del  ‘72).
Thompson se destacaba por una literatura salvaje, desbordada e intoxicada. Fue un gran cronista de su época, que supo instaurar un nuevo término, por su forma distinta de contar en el mundo de la grafica y los grabadores. Acuñó – en las páginas de miedo y asco en las vegas - el ya conocido y no tanto: Periodismo “Gonzo”. Esta categorización, si se quiere, nace por el estilo que desarrolló para informar y escribir. Era un periodismo de investigación, desde la ficción, sin ningún tipo de escritorio de por medio. Su lógica para contar era, el estar ahí. Se involucraba, de tal manera con lo que iba a contar, que en el libro: The Hell’s Angels (Los ángeles del Infierno; es la historia de una banda de motociclistas, que sembraban terror por todos sus alrededores) Pasó un año con estos forajidos, hasta que empezó a desestabilizarse la relación, cuando estos comenzaron a sospechar que estaba haciendo plata con ellos. Entonces, primero, le exigieron parte de las ganancias y luego le dieron una gran golpiza. A pesar de todos sus inconvenientes, revelaba que había estado presente en una fiesta de los Hell’s Angels, en donde pudo observar bien de cerca que el termino, que estos utilizaban para definir las juntadas no era “Hippie” sino “Acid – Head” (Adictos al LSD). Cuenta Tom Wolfe en una nota homenaje que escribió a la semana del suicidio, que luego de esta alianza que registro, Thompson, entre hippies y motociclistas, los Rolling Stones terminaron contratando a esta banda de robustos como sus guardias de seguridad. Cuenta, también, que para su libro “The electric kool – aid acid test”, utilizo la escena de la fiesta que Thompson describe en ese libro, pero primero, dice, que lo llamo para que le brinde sus recuerdos sobre esto que había vivido y sin más, recibió junto con las anécdotas, las grabaciones que había podido registrar, de su estadía con “Los Ángeles del Infierno”.  
Horrores delirantes siempre descriptos por una sencillez única, casi emparentándose con un Williams Burroughs o un Bukowski. Hunter, fue un  periodista plenamente sumergido en las realidades más difíciles de contar, aportando corrosividad a cada hecho. Siempre con las notas realizadas a último momento, casi que entregaba los borradores.
Se dice también que, una vez  lo enviaron desde una revista, a cubrir una importante carrera de caballos y como demoro bastante en armar esta nota, debido a que sus distracciones por vivir eran constantes. Cuando el editor paso a recoger esta cobertura, por miedo a no cobrar, le entrego su blog de notas, el cual salió publicado, sin ningún tipo de corrección. Aquello resulto maravilloso.
Este personaje, alter ego, en todas sus novelas, desarrollo su vida de la misma manera que en su literatura. Fiel y consecuente, se consagro como un referente contracultural de la cultura norteamericana de los años 60 y 70. Personalidad, compuesta por adjetivos tales, como: loco, marginal, drogadicto, acido, violento e irónico, el 21 de Febrero del año 2005, termino con su vida, disparándose un tiro en la cabeza.

Obras:
El escritor Gonzo
El diario del ron
La gran caza del tiburón
Miedo y asco en Las Vegas
Los Ángeles del Infierno

lunes, 21 de mayo de 2012

RAJEMOS

Poeta no puedo ser
Novelista tampoco
Quizá un afanoso lector, si
¿Y donde va a parar todo eso?

Un lustroso con las palabras
Escapa de mi estilística
Lo más que puedo encontrar
Es el efecto pasional

No hay paciencia para pensar
Se dice que ya esta todo pensado
Y lo que imprime los efectos
Son estas ganas de rajar

¡Cobarde! Dice uno por allá
El esfuerzo fue muy sofisticado
Condenados a persistir una existencia
Detrás de un humo maloliente

NADA


Hambre, hambre, tengo hambre, señor
Espero que no sea una ofensa pedirle esa sobra
Seguramente lo más que lleva sin nada en la barriga
Es una hora…

Siempre detrás del bando de los necios
Creyendo que hay piedad
Optando por ser honesto
Mi alma es portadora de pluralidad

Aunque estas líneas ahuecadas
Por sensibilidad, pasen al vacío
Esta vorágine crónica
Cada vez es más vital

Urgencias parecen
Mis palabras casi sacadas
No son más que algo de sorna
Que se pudren por ser nadie

viernes, 18 de mayo de 2012

Segundo sexo

Yo no se si es ella
El karma de esta veda
Pero en tiempos de guerra
Es mejor abrazarla

Hay muchas drogas buenas
¿Cual es la indicada para tu corazón?
En boga esta el amor
Cualquier ligazón dura media hora

Propósitos que siembran la rudeza
Los guapos no viven sin novela
Golpizas a la bruja sino quiere lavar
Se le dice ramera cuando abandona

No solo un receptáculo sexual
Castor reacio, habla mujer rota
Entiéndalo mundo libidinal
El segundo sexo resistirá

Ignorancia a su estandarte

La brecha entre el miedo y la razón
Apura a las ansias de un final
Algunos maestros supieron explicar
Que la retaguardia queda baja

Lecturas nocturnas buscando verdad
Solo duran un rato, ¿y donde esta mamá?
Gritos ahogados en la soledad
La tele marca tu hora

Las veleidades bíblicas
No aceptan la ignorancia a su estandarte
Vivir idolatrando a ese ser superior
Ciega las disputas en lo terrenal

Abarrotados en opiniones ajenas
Todo se resume en más violencia
Es la hazaña pastoril de la tecnocracia
Que todo este bien y de gracia

Lecturas nocturnas buscando verdad
Solo duran un rato ¿Y donde esta mamá?

Un Affair con la literatura




Manuel Puig, caso excepcional y vanguardista, considerado un artista pop. Su literatura conversacional ha marcado una ruptura en la forma de contar. Aunque para muchos críticos no implica que su estilo sea vanguardista, porque argumentan que no está hecho con intención de romper algo establecido. Es decir no intenta el parricidio que planteaban los surrealistas.
¡Pero qué va! Eso no importa, lo que interesa es la gran obra que nos ha legado. Un artista, quizá, anti – happening, para un Masotta, pero a la vez un pop, al nivel de David Bowie. Un músico sin guitarra, que maldecía eternamente a quien lo leyese.
Su obra incuestionable, provocó que hurguetearan en su sexualidad. Los más homofóbicos, nunca entenderán como una persona puede desparramar tantos diálogos descomunales y por sobre todas las cosas, nunca aceptaran las exquisiteces de un maldecido ¿puto?
Estos tipos, si que la tenían lunga con el arte de escribir. Imagínate que consideraban a Roberto Arlt, un mal escritor y se despacho con “Los Siete Locos”, que no está demás decirlo, está considerada por Ricardo Piglia, la mejor novela del siglo XX . O tenes a un Soriano que te escribe: Triste, solitario y final o No habrá más penas ni olvido. Parecen sandeces las que estoy diciendo, pero estas novelas, quisieran (reconocido por él) ser escritas por un Jose Pablo Feinmann.
La literatura Argentina, tiene una vibrante biblioteca que hay que indagar e interiorizarla. Y si no, también, se puede hablar de grandes revistas que tuvimos en la Argentina: Crisis (Jefe de redacción: Eduardo Galeano), Los libros (Ricardo Piglia, Beatriz Sarlo), Contorno (Dirección: David e Ismael Viñas), o la misma revista Sur (J.L.Borges, Adolfo Bioy Casares y Victoria Ocampo) catalogada de visión europeizante y pro – americana. Tampoco podemos olvidarnos de: El ornitorrinco (Abelardo Castillo y Liliana Heker) y El escarabajo de oro (Abelardo Castillo)
Esta nota no se cuanto sentido pueda llegar a tener, pero es un  affair que acabo de tener con algunos de estos maravillosos creadores. Un leve contacto y homenaje, a estas figuras que nos han llenado y algunos lo siguen haciendo, de maravillosas palabras y libros. 

miércoles, 9 de mayo de 2012

Todos quieren ser Bovary

El humo es muy espeso, difícil es tragar
Se forman nuevas legiones para perseguirte
Siempre quisiste correr, estas desesperado
Difícil es vivir sino jugas, a ser un Napoleón

Nubarrones de esa estrella nostálgica
Que llora por una plaza roja
Hemos pretendido un cambio singular
Pero ya lo dijo ese Carlos, la cosa es mundial

Expectantes por no morir en la acidez industrial
Buscamos la forma en un dogma
No se si es cierto lo de aquel “ismo”
Pero me convence su lucidez

Los tipos caras elegantes
Dicen que esto dura hasta los treinta
Es un encanto jovial, maldecir la autoridad
Y después todos quieren ser Bovary

Un cuento idiota

Tus historias las tenes que pagar
Aquellos se retuercen al escucharte
Los señores de pañuelo al cuello
Claman muerte súbita al que va a gritar

Viñetas salpicadas en la pared
Son los anuncios de la nueva generación
No creen, que todo se acabó en el ayer
Todos estos actos tienen mucha información

Un cuento narrado por un idiota
Aquel tango igual sigue sonando
Es la voz de un Rivero canallesco
Describiendo el conventillo de la calle Olavarria

Mi parlante no para ese arrabal
La tristeza de las almas al deambular
Arrasadas por un tiempo virtual
Paseo y te visito desde mi hogar
 

domingo, 6 de mayo de 2012

Soliloquios reventados


Todos los días viajo en el mismo tren para ir a trabajar, hace catorce años que veo lo mismo; vendedores de todo tipo, chicos de menos de diez años “trabajando” para el hijo de puta del jefe, (su padre) que según el grado de hijaputez que pueda tener, golpeara menos a su hijo que otros. Todo depende de cuánto lleven a casa.
También recibo algunos piedrazos a manos de niños, (si leen bien, NIÑOS) que ya le escupen a la sociedad al mejor estilo, tablero de tiro al blanco y podría contar algunas cosas más pero….
Cuando yo era adolescente, recuerdo que mi madre decía “en la vida hay que esforzarse, lo más importante es estar en armonía con lo que haces”. Si tuviera la posibilidad de contestarle en estos momentos, le diría que esas son patrañas que solo venden humo al desdichado. ¿Cómo carajo se puede soportar las flatulencias de la cotidianeidad?
Quizás piensen que mi crónica es pesimista pero solo son algunos instantes en los que desprendo soliloquios encolerizados. Generalmente cuando llego del trabajo, la única que me espera es la enternecedora botella, que me incita a joder y maldecir todo mi alrededor.
El respaldo de mi sillón es el causante de mis reflexiones, con tan solo apoyar la cabeza y notar tamaña comodidad, se me abren todas las dudas acerca de que mierda es todo esto. Casi yo diría que es inevitable, no dar esos bruscos tragos a mi vaso de vino, para después soltar desgarradoras puteadas contra dios y Maria santísima. He hecho un trueque con mi fe, la cambie por alcohol, jajajaja…….
Quienes puedan saberse felices y dichosos, pues bien parecen expertos en enfrentar el oleaje de la misericordia. Tremendas mañanas las de esas personas, gozando de todas las caridades que han ofrecido el día anterior. Los argenpanqueques si que sabemos eso de acomodarnos a cada situación, hasta creo que es un don no reconocido, pero bueno mejor seguir viviendo así, ¿no?  

Monologo interior


Ya escuchaste todo, parece que no hay más
La sombra de lo bueno posada en los setenta
Me río de lo ajeno, ya no le voy hablar
Es solo su triunfo lo que va a prevalecer

Mirar por la escalera del dolor
Hemos dejado que se lleven la razón
Que torpeza es creerte mi amor
Supiste seducirme con promesas

Penas marchitadas que se beben
Filosofando en ese bar
La dolencia de los afectados
Fue un rechazo marginal

Temple distante, atento al acecho
Las horas no detienen la felicidad
Es solo un momento, nada quedará
Monologo interior, que más te puedo dar

martes, 1 de mayo de 2012

Política de zaguán



 El derrotero chabacano que nos quiere conquistar, ultrajando nuestra zona roja que se impone con la mejor puteada a aquel que fue, el productor de esta fanfarria.
-Oiga usted, perverso mal insano testaferro de la mentira. Permítame insinuarle que su puesta en escena ha sido contraatacada por un grupo, que para usted créame, son unos barbaros perdidos en los peores suburbios, abrazados a las drogas más pesadas.
Quizás esta sea una primera aproximación a la provocación que soterrada, intenta la purificación de esta gran puta que no se entrega así nomas. En este caso la ramera te da dinero para que entregues las armas. Sus encantos son tan certeros que se termina metiendo la mano en el bolsillo, para dar un grito precoz.
Finalmente besas los labios más perversos, más pasionales y ahora este metejón genera la caravana de fieles creídos que piensan lograr conquistarla. Detrás del murmullo de esta gran mujer que prostituye la ilusión, buscando distraer el compromiso en cualquier zaguán, reparte dinero para quien quiera dejarse zampar, los únicos requisitos son, tener predisposición para el juego sexual, disponibilidad horaria y una gran cuota de diplomacia para saber tratarla y que no se enfade, sino no hay cotoneo.
Melosos predispuestos a entregar su vida entera para morirse tranquilos, bajo los ribetes del placer de haber complacido su necesidad de ser subyugado.